Esperanto y el nuevo orden mundial

El esperanto y el nuevo orden

La dedicación de los esperantistas a la creación de un nuevo orden lingüístico mundial se expresa en el manifiesto de Praga, proclamado en el LXXXI Congreso Universal de Esperanto (1996), y en la resolución de ese mismo congreso se invitó a todos los organismos internacionales e instancias relacionadas con la política lingüística a colaborar con el movimiento esperantista en la creación de un “orden lingüístico mundial más justo y democrático”.

El comité de UEA aprobó el lanzamiento de una campaña, cuyo objetivo es elevar el prestigio de la lengua internacional, especialmente entre personas e instancias influyentes, así como crear consciencia acerca de las posibilidades prácticas que ofrece la lengua internacional.

 El comité, asimismo, convocó a las asociaciones nacionales y especializadas de la comunidad esperantista a disponerse al intenso trabajo para, entre todos, hacer avanzar a la lengua internacional a una posición más fuerte para el siglo venidero, posición que el esperanto merece y que ahora parece estar a su alcance.

 Sin embargo, bien conocemos la realidad política del mundo lingüístico internacional. Debemos analizar racionalmente la realidad, convencer amistosamente a las organizaciones respectivas y, paso a paso, fortalecer el apoyo político. Intentamos apelar a la Organización de Naciones Unidas y al Parlamento Europeo para instarlos a estudiar y discutir una lengua auxiliar internacional, y a enseñar y utilizar, a título de prueba, al esperanto como lengua internacional. Necesitamos del apoyo y participación activos de todos los esperantistas en esta campaña.

Éstas son las peticiones específicas a los esperantistas individuales, a las asociaciones nacionales y especializadas de UEA, así como a otras organizaciones esperantistas, estaciones de radio y periódicos que actúan en forma independiente:

  • Escribir e informar a los medios de comunicación nacionales acerca del manifiesto de Praga, de la resolución del LXXXI Congreso y del concepto, necesidad y posibilidad de un nuevo orden lingüístico mundial.
  • Escribir a los representantes nacionales ante la ONU y a los diputados del Parlamento Europeo acerca de la necesidad y la posibilidad práctica de una lengua internacional, y pedirles que apoyen la propuesta de estudiar, usar y enseñar a título de prueba el esperanto como lengua internacional.

Si consideramos la creciente presión que ejerce el problema lingüístico sobre esos organismos internacionales, es necesario adoptar un nuevo orden lingüístico.

 Los asiáticos deben ser pioneros en la creación de este nuevo orden, que parece estar a nuestro alcance. Ésta es la misión de los esperantistas asiáticos para el siglo XXI, de la cual podrán enorgullecerse.

algunos han encontrado un nuevo argumento: que intenta terminar con el excepcionalismo norteamericano también en el campo lingüístico, mediante la introducción del esperanto. Ésa es por ejemplo la conclusión de un blog conservador, que hace referencia a una campaña que se desarrolló hace unos meses en la web Change.org para permitir la introducción del esperanto en las escuelas de ese país.

A los esperantistas les agradará saber que la campaña fue exitosa. “Me han informado de una fuente fiable que gran parte de estímulo económico de Obama destinado a educación se va a destinar a la enseñanza del esperanto en las escuelas públicas” (it has been reported to me now by a reliable source that a large part of Obama’s education stimulus is designated for Esperanto instruction in the public schools). La información aparece en otro blog conservador, en el que los comentarios son aún más agrios que el propio artículo. El esperanto es considerado como una parte sobresaliente del llamado “Nuevo Orden Mundial” – una expresión que en otros medios podría ser considerado un concepto positivo.

El manifiesto de Praga lo puedes leer aquí:  manifiestodepraga